La sana costumbre de tomar café tras la comida
La mayoría de las personas tenemos por costumbre tomar café tras la comida de mediodía. Unas tienen sistematizado este hábito y otras lo hacen por puro placer y así disfrutar de la conversación en la sobremesa.
Es un hábito saludable aunque es preferible tomar la taza de café o té unas dos horas después de la comida. De esta manera, nos beneficiaremos mejor de las excelentes propiedades antioxidantes de estas bebidas ya que si se toman de inmediato tanto el café como el té pueden interferir en la absorción de hierro de los alimentos consumidos.
El consumo de café después de comer mejora el proceso digestivo y ayuda a saciar el apetito, por lo que reduce las posibilidades de picar entre horas. El café acelera la digestión haciéndonosla sentir más placentera y fácil de sobrellevar. La cafeína que posee hace que la liberación de enzimas del páncreas sea más rápida. Estas enzimas se encargan de digerir las proteínas y grasas en el estómago, hecho por lo que tomar café tras la comida del almuerzo es un hábito saludable y nada perjudicial.
El café también ayuda a eliminar toxinas, reduce los posibles gases tras comer y minimiza la sensación de hinchazón y pesadez. Si se está a dieta puede convertirse en un sustituto ideal del postre siempre y cuando sea tomado con moderación.